A mí me daban dos

Hoy, y precisamente hoy, voy a contar una historia, no es que sea de las más interesantes que puedas encontrar en Internet, sobre todo cuando todo el mundo sabe que existe Youtube. Hace dos años un joven frikie, o un frikie joven, como se quiera mirar, decidió sacar más provecho de Google creando un blog en Blogger, por probar... ¿Qué se iba a perder por probar? Os lo diré yo: tiempo. Habré perdido una media de 50 horas, más de dos días de mi vida, en escribir en el blog.

Increíble, ¿no? Te paras a pensar en todo el tiempo perdido, en que hubiera pasado si... y no acabas... Quizá no estemos destinados a nada y aún así el mundo sea cíclico. Puede que el mundo sea siempre igual pero la intencionalidad de las personas no lo sea, no se si me explico. Que físicamente todo ocurra igual pero, si aquello que nos lleva a actuar de una manera u otra, no es algo material, no se repetirá de igual forma. De manera que es posible que podamos volver a vivir una segunda vida, puede que ya hayamos vivido varias veces y no lo sepamos. En fin, centrarse en temas tan metafísicos no es bueno para una tarde de viernes aunque ésta no prometa muy buen tiempo.

De todas formas, es inevitable, el tiempo pasa, las cosas cambian, nosotros cambiamos y no podemos hacer nada excepto aprovechar el tiempo, porque muy a nuestro pesar, es lo único que continúa progresando, ilimitadamente, existamos o no. En el fondo nunca nos paramos a plantearnos estas cosas, uno vive y punto, pero no piensa ¿y si el tiempo se detuviera?
¿Seríamos capaces de percibir si el tiempo se ha parado? Si con el tiempo también nos paramos nosotros quiere decir que podemos habernos detenido infinitas veces y no habernos dado cuenta jamás... Odio estos quebraderos de cabeza, odio pensar que algo es posible pero no puedo verlo.

Por eso atraerá tanto lo paranormal, digo yo. La gente se aburre de la monotonía de sus tristes vidas para creer en "Más Alláses" ficticios o reales, eso en el fondo da igual, lo verdaderamente importante es que la gente es capaz de perder el tiempo por no creer su vida lo suficientemente interesante, por devaluarse a sí mismos.

A lo mejor no es la última ni la primera vez que escribo esto, o quizá sea todo lo contrario... puede que ésta sea la única vez en la que yo me decante por escribir y tu la única vez en todas tus vidas que puedas leerlo. Es más, puede que ni siquiera hagan dos años con este post, quizá han existido tantas pausas entre segundo y segundo que a lo mejor llevo un millón de años escribiendo esto y ni siquiera me he dado cuenta.

En el fondo, todo es cuestión de percepción, como decía/dice/dirá Kant, el límite de lo que conocemos está en el límite de nuestros sentidos, no entenderemos más allá del espacio-tiempo, no conoceremos nada más allá de nuestras monótonas vidas, quizá intuyamos que algo existe pero no lograremos mucho más.